La última vez que se registró un buen movimiento en lo que va del año fue en vísperas del pasado 15 de noviembre, fecha en que el Brasil celebró el día de la Proclamación de la República, que cayó un día martes generando de esa manera un feriado prolongado a partir del viernes 11 del mismo mes.

Uno de lo factores que pudieran estar generando este fenómeno, es la situación política por la que viene pasando el Brasil desde las pasadas elecciones del pasado 30 de octubre en que ganó el candidato del PT, Luiz Inacio Lula Da Silva, victoria esta que hasta hoy no fue aceptada por los seguidores de Jair Bolsonaro del PL, quienes continúan manifestándose frente a los cuarteles militares y realizando cortes de rutas.

Otro de los factores podría ser la inestabilidad de la moneda brasileña, el Real, cuya cotización con relación a la moneda norteamericana, el Dólar, varia constantemente de entre 5,45 a 5,55 reales por dólar. Esto hace que para el comprador brasileño, los precios de los productos en reales aumenten, aunque estos se mantengan en dólares. Un buen ejemplo sería un producto que en agosto costaba 100 dólares, que en reales al cambio de 5,16, representaba 516 reales, mientras que al cambio de hoy, 5,45 reales por dólar, representan 545 reales, una diferencia de 29 reales, que parece poco, pero que multiplicado por 10 ya suman 290 reales.

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